3 estudiantes canarios agredidos por nazis en Budapest
Tres jóvenes canarios, estudiantes en la Universidad de Budapest -uno de ellos gracias a una beca Erasmus-, recibieron este martes por la noche una brutal paliza por parte de un grupo de neonazis. La agresión ha
puesto de manifiesto el desamparo al que se ven sometidos los estudiantes extranjeros en Hungría, ya que pese a tratarse de un país integrado en la UE, ha tenido que ser la Embajada española la que moviese los hilos para que los jóvenes recibieran -casi doce horas después- una mínima atención médica y policial.
El violento ataque, a cargo de un grupo de siete u ocho jóvenes ataviados con claros distintivos neonazis, se produjo a las puertas de la Karman Collegium, residencia oficial de la Universidad húngara donde se hospeda desde octubre Jabel Alejandro R.N., becado con una Erasmus. Durante la agresión los jóvenes no pararon de reclamar ayuda al portero de la residencia, que pese a estar viendo todo lo que estaba sucediendo, se negó a abrir las puerta del centro hasta que no se marcharon los agresores.
Tras lo ocurrido, los jóvenes demandaron la presencia de la policía que, lejos de prestar atención a las víctimas, mostró un total desinterés por el asunto. Además de negarse a entregar el correspondiente comprobante de denuncia, los agentes llegaron incluso a insinuar que los agredidos podían terminar detenidos si continuaban reclamando dicho comprobante.
La policía incluso se mostró en un principio reticente a que los jóvenes recibiesen asistencia médica, algo visiblemente necesario después de la brutal paliza.
Una vez los agentes de policía concedieron el pertinente volante para ser atendidos en un centro sanitario, los heridos lograron ser trasladados en ambulancia hasta el hospital Janos Kojhas. Sin embargo, allí los jóvenes estudiantes también se toparon con más de un obstáculo. El principal
impedimento para poder ser atendidos fue la obligatoriedad de abonar por adelantado y en efectivo una determinada cantidad económica.
De nada sirvieron los comprobantes que los jóvenes aportaron, como el seguro médico que poseen como estudiantes de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, además de la Tarjeta Sanitaria Europea. Una tarjeta que, supuestamente, sustituye a todos los formularios necesarios para recibir atención médica en los Estados miembros.
Además, Jabel Alejandro, como becario Erasmus, dispone del seguro médico correspondiente a la beca que cubre la Unión Europea.
Ni reconocimiento médico ni parte de lesiones. Lo único que consiguieron los estudiantes fue que se les limpiase la sangre y se les suministrase un calmante.
Intervención de la Embajada española
Pese a que Hungría forma parte de la UE desde hace casi un año, tuvo que ser la Embajada española la que con su intervención -desde primera hora de la mañana de este miércoles- lograse que los jóvenes fueran atendidos por facultativos de Budapest, casi doce horas más tarde de la agresión. No obstante, hasta este jueves no tendrán el correspondiente parte médico previo pago de la pertinente cuantía económica.
También este jueves en la Embajada de España tendrá lugar una reunión con responsables de la Policía de Budapest con el objetivo de aclarar los hechos.
Según informó a CANARIASAHORA el padre de Jabel Alejandro, desde el Gabinete de Relaciones Internacionales de la ULPGC cerca del mediodía de este miércoles también se realizaron algunas gestiones ante la la Universidad de Budapest con la intención de mostrar la más contundente de las repulsas por lo ocurrido. La institución académica húngara ha declarado que "se está investigando" el suceso.
Un suceso que también ha movilizado a la Subdelegación del Gobierno en Las Palmas, así como al Parlamento Europeo -a través del eurodiputado Manuel Medina-.
El padre de Jabel Alejandro quiso manifestar su indignación frente al desamparo al que se ha visto sometido su hijo, a la vez que reclama el cumplimiento de los acuerdos europeos. "Lo ocurrido es un claro quebranto de los acuerdos internacionales de reciprocidad", subrayó.
La policía llegó a amenazar a los agredidos con la detención si continuaban pidiendo el comprobante de denuncia
Pese a las grave agresión, en el hospital se negaron a atender a los estudiantes si antes no pagaban una cantidad económica en efectivo
Canarias Ahora .com
17 Marzo
Las Palmas de Gran Canaria
puesto de manifiesto el desamparo al que se ven sometidos los estudiantes extranjeros en Hungría, ya que pese a tratarse de un país integrado en la UE, ha tenido que ser la Embajada española la que moviese los hilos para que los jóvenes recibieran -casi doce horas después- una mínima atención médica y policial.
El violento ataque, a cargo de un grupo de siete u ocho jóvenes ataviados con claros distintivos neonazis, se produjo a las puertas de la Karman Collegium, residencia oficial de la Universidad húngara donde se hospeda desde octubre Jabel Alejandro R.N., becado con una Erasmus. Durante la agresión los jóvenes no pararon de reclamar ayuda al portero de la residencia, que pese a estar viendo todo lo que estaba sucediendo, se negó a abrir las puerta del centro hasta que no se marcharon los agresores.
Tras lo ocurrido, los jóvenes demandaron la presencia de la policía que, lejos de prestar atención a las víctimas, mostró un total desinterés por el asunto. Además de negarse a entregar el correspondiente comprobante de denuncia, los agentes llegaron incluso a insinuar que los agredidos podían terminar detenidos si continuaban reclamando dicho comprobante.
La policía incluso se mostró en un principio reticente a que los jóvenes recibiesen asistencia médica, algo visiblemente necesario después de la brutal paliza.
Una vez los agentes de policía concedieron el pertinente volante para ser atendidos en un centro sanitario, los heridos lograron ser trasladados en ambulancia hasta el hospital Janos Kojhas. Sin embargo, allí los jóvenes estudiantes también se toparon con más de un obstáculo. El principal
impedimento para poder ser atendidos fue la obligatoriedad de abonar por adelantado y en efectivo una determinada cantidad económica.
De nada sirvieron los comprobantes que los jóvenes aportaron, como el seguro médico que poseen como estudiantes de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, además de la Tarjeta Sanitaria Europea. Una tarjeta que, supuestamente, sustituye a todos los formularios necesarios para recibir atención médica en los Estados miembros.
Además, Jabel Alejandro, como becario Erasmus, dispone del seguro médico correspondiente a la beca que cubre la Unión Europea.
Ni reconocimiento médico ni parte de lesiones. Lo único que consiguieron los estudiantes fue que se les limpiase la sangre y se les suministrase un calmante.
Intervención de la Embajada española
Pese a que Hungría forma parte de la UE desde hace casi un año, tuvo que ser la Embajada española la que con su intervención -desde primera hora de la mañana de este miércoles- lograse que los jóvenes fueran atendidos por facultativos de Budapest, casi doce horas más tarde de la agresión. No obstante, hasta este jueves no tendrán el correspondiente parte médico previo pago de la pertinente cuantía económica.
También este jueves en la Embajada de España tendrá lugar una reunión con responsables de la Policía de Budapest con el objetivo de aclarar los hechos.
Según informó a CANARIASAHORA el padre de Jabel Alejandro, desde el Gabinete de Relaciones Internacionales de la ULPGC cerca del mediodía de este miércoles también se realizaron algunas gestiones ante la la Universidad de Budapest con la intención de mostrar la más contundente de las repulsas por lo ocurrido. La institución académica húngara ha declarado que "se está investigando" el suceso.
Un suceso que también ha movilizado a la Subdelegación del Gobierno en Las Palmas, así como al Parlamento Europeo -a través del eurodiputado Manuel Medina-.
El padre de Jabel Alejandro quiso manifestar su indignación frente al desamparo al que se ha visto sometido su hijo, a la vez que reclama el cumplimiento de los acuerdos europeos. "Lo ocurrido es un claro quebranto de los acuerdos internacionales de reciprocidad", subrayó.
La policía llegó a amenazar a los agredidos con la detención si continuaban pidiendo el comprobante de denuncia
Pese a las grave agresión, en el hospital se negaron a atender a los estudiantes si antes no pagaban una cantidad económica en efectivo
Canarias Ahora .com
17 Marzo
Las Palmas de Gran Canaria
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