Una bronca de tintes xenófobos marca la fiesta del Bayern de Munich por el título de Liga de fútbol

Con una espectacular bronca, motivada por ataques xenófobos
contra el jugador peruano Claudio Pizarro, terminó la fiesta organizada para la
plantilla del Bayern Múnich con motivo de su 19° título de campeones de Liga.
Según el diario, Bild Zeitung, que no ha sido desmentido, los insultos contra
Pizarro se iniciaron después que el peruano cantara una canción en español, en la
discoteca P1, donde se bebió sin pausa.
Gran parte de sus compañeros de equipo se burlaron y atacaron a
Pizarro, y varios de ellos lo hicieron resaltando su condición de extranjero. El
peruano habría intentado bañar con cerveza a los compañeros, y a partir de ese
momento la fiesta se transformó en una batalla. Según el periódico
sensacionalista, los jugadores del Bayern estaban muy molestos cuando, a altas
horas de la madrugada, Pizarro y el argentino Martin Demichelis hicieron gala de
sus dotes de latin lover.
El carácter xenófobo de los ataques fue confirmado por Tobias
Rau, quien dijo que los problemas se agravaron cuando dos personas, claramente
borrachas, "dijeron algo contra los extranjeros". En ese momento, Pizarro saltó
contra ellos y le siguió su compañero Michael Ballack. Cuando Andreas Görlitz
trató de mediar recibió un golpe en la cabeza. "Me dolió mucho", explicó.

ABUCHEOS A SCHRÖDER
Según otros presentes la fiesta había empezado con un marcado
tinte político, con división de opiniones (aplausos y abucheos) en torno al
canciller, el socialdemócrata Gerhard Schröder. El jefe del Gobierno envió un
telegrama de felicitación al campeón, que fue leído por el vicepresidente
Karl-Heinz Rummenigge. Algunos futbolistas lanzaron ataques contra el canciller,
quien había dicho que su favorito era el Schalke 04.

El Periódico
GONZALO CÁCERES
BERLÍN